
Es la tendencia imparable que ha venido no para quedarse sino ser la protagonista. Tener una casa domótica es la reforma indiscutiblemente ligada al siglo XXI. Pese a lo que pueda parecerte, es más asequible de lo que piensas. Te demostramos como domotizar tu hogar sin necesidad de acometer grandes reformas en tu vivienda.
Y es que, aún existe mucha confusión sobre lo que implica una casa domótica. A un paso de inaugurar la segunda década de este siglo, es necesario rebatir esos argumentos que hacen que se vea como algo lejano y que sólo se pueden permitir unos pocos privilegiados.
Desmontando errores sobre las casas domóticas
Como te adelantábamos, la primera equivocación que se refiere a la domotización de las viviendas se refiere a las obras que deberías acometer obligatoriamente en tu hogar. No es cierto que sean necesarias. ¿Acaso no funcionas ya con tecnología inalámbrica en la mayor parte de tus dispositivos? Pues, ¡con la casa domótica ocurre lo mismo! No todo el entramado, pero hay determinados procesos que se pueden automatizar sin que haga falta el cableado.
Además de ahorrarte algunas obras, que puedas usar tu Wifi para solventar parte de las funciones de esa deseada casa domótica sirve para que vayas introduciendo los cambios de forma progresiva. Esta posibilidad de escalonar los avances resuelve el otro gran problema de la domotización, el presupuesto. Irás invirtiendo poco a poco, tu casa domótica no implica que tengas que gastar un dineral desde el primer momento. No te podemos proporcionar un precio definitivo, pero calcula que con unos 2.000 euros tendrías para acometer esa primera fase.
El desconocimiento es también un importante obstáculo que impide a muchos lanzarse a esta interesante reforma. Un recelo ante las transformaciones profundas en nuestros hábitos de vida que se diluye fácilmente sólo poniendo encima algunas de las indiscutibles ventajas que conlleva una casa domótica: ahorro de tiempo en rutinas, reducción de los gastos en suministros o una considerable mejora en el confort.
Los imprescindibles en una casa domótica
Seguro que a estas alturas estás impaciente por conocer los primeros pasos que puedes dar para disfrutar de tu casa domótica. Una aclaración más, antes de pasar a las acciones concretas, no retrases los cambios porque vivas de alquiler o tengas previsto cambiarte de casa. Ten en cuenta que todo lo que instales con tecnología inalámbrica te lo llevas contigo allí donde vayas.
Para los primeros pasos puedes recurrir a los grandes de internet, Amazon y Google no paran de poner en el mercado dispositivos y herramientas para acometer algunas de las funciones esenciales de una casa domótica. La famosa Alexa o Home Max son dos asistentes tecnológicos que se manejan sin problemas desde el móvil y que, además, son compatibles con terceras empresas. Así, tienes automatizados a un toque de móvil tus altavoces, televisores o incluso las luces de tu casa.
Mediante la instalación de los correspondientes sensores, irás mejorando la funcionalidad de tu casa domótica. Por ejemplo, controlando la seguridad, incluso hasta el punto de saber qué miembros están en casa. Otro de las utilidades más generalizadas es la que se refiere a la automatización de la climatización de tu vivienda. No se trata sólo de encender o apagar calderas o aires acondicionados, sino de conseguir mantener siempre las condiciones ideales de temperatura, con el consiguiente ahorro energético y contribución al cuidado del medio ambiente que suponen estas medidas.
Cualquiera de las medidas que quieras implantar para tener una casa domótica es preferible que la consultes con especialistas. En Decorman contamos con un equipo de profesionales que resolverá tus dudas y te orientará para que el siglo XXI entre en tu vivienda sin más demoras.