
Olvídate solo de pintar. La verdadera revolución en revestimiento de paredes viene de la mano de las nuevas texturas para tus habitaciones. Un efecto tan original como acogedor. Te contamos todos los secretos de esta nueva técnica que está protagonizando los proyectos de reforma de viviendas. ¡Te resultará más que inspiradora!
Las distintas soluciones para revestimiento de paredes son siempre una salida efectiva para darle un nuevo aire a tu hogar. A los papeles pintados y la pintura se unen otras fórmulas que puedes acomodar a tus gustos y preferencias decorativas. Te proponemos algunas de las más interesantes.
El efecto transformador de las fibras, naturales o artificiales
Si estás buscando dar un toque de elegancia y estilo, tu opción en revestimiento de paredes son las texturas que proporcionan las fibras. Tienes mucho donde elegir, desde la sutileza que aportan el ratán, el bambú o la rafia al aire más vanguardista que proporcionan las fibras sintéticas, con innumerables variaciones de acabados y colores. Incluimos en este apartado una solución muy rompedora, usar malla metálica. ¡Ni te imaginas el resultado!
La clave para que un revestimiento de paredes con fibras es no saturar. Hay que combinar con paredes pintadas o empapeladas. También funciona muy bien si divides la misma pared y utilizas materiales distintos en la parte inferior y en la superior.
Las soluciones sostenibles en revestimiento de paredes
Aunque sería igual de acertado denominar a este grupo como el de los materiales más clásicos. Porque hablamos de revestir las paredes con corcho, madera o cerámica. Es verdad que son fórmulas que relacionamos más con los pavimentos, pero aquí les damos una nueva vida trasladándolas a las paredes.
El caso de las piezas de cerámica texturizada merece una mención aparte por el sorprendente atractivo visual que aportan a una habitación. Es el efecto 3D transportado a nuestras paredes, ¡tendrás ganas de tocarlas! Los juegos de luces y sombras que se consiguen son inigualables.
Igual de sugerentes son los usos decorativos del ladrillo. Si se deja en su tono terracota natural se consiguen ambientes muy acogedores. Si lo combinas con metales o cristal es perfecto como revestimiento de paredes en entornos con estilo industrial. Tampoco nos olvidamos de la piedra natural, que puede adquirirse en placas o en una sola pieza para crear un muro completo.
El poder de la imaginación con un mix de texturas
¿Y combinar varias de estas ideas? Quizá es una opción de revestimiento de paredes reservada solo para los atrevidos. Sin embargo, basta comprobar en directo los resultados para apuntarse a este formato. A modo de ejemplo, piensa en una pared revestida con corcho, enmarcada con un borde de madera y acompañada de papel pintado. El juego de colores te lo dejamos a tu gusto.
El revestimiento de paredes más sencillo: yeso
Sencillo no es sinónimo de aburrido o falto de personalidad. Todo lo que tienes que hacer es elegir muy bien los colores de pintura para ese acabado de paredes. Si pintas con tonos ocres o gris suave sobre el mortero directamente ese efecto “rasposo” es ideal para recrear ambientes rústicos. Pero, no te olvides que el yeso permite modularse, es decir, que puedes darle formas tan decorativas como quieras, las más habituales son las composiciones geométricas, aunque no descartes otro tipo de figuras. El efecto relieve que se consigue siempre es espectacular.
Si estás harto del revestimiento de tus paredes, es el momento de darle una oportunidad a las nuevas texturas en las habitaciones de tu vivienda. En Decorman contamos con un verdadero equipo de especialistas en esta y cualquier otra reforma que quieras acometer. ¡No dudes en pedirnos asesoramiento!