Para decorar las paredes de una vivienda tienes más opciones de las que parece. No hay que limitarse únicamente a pintarlas o a cubrirlas con papel pintado. Hay más opciones decorativas, que incluso pueden llegar a protegerlas o a disimular defectos. Una de ellas es el friso para paredes.
Este tipo de elemento decorativo para las paredes no es algo nuevo. Ni mucho menos. Ya se utilizaba en la antigüedad, y aunque se utilizó bastante en otro tiempo, parecía que había caído en desuso. Nada más lejos de la realidad, y además se ha actualizado. Así, puedes encontrar friso para paredes de diferentes materiales y acabados, lo que los hace ideales para todo tipo de estancias. Pero antes, veamos de qué hablamos cuando hacemos referencia al friso para paredes.
Qué es el friso para paredes
Un friso no es mas que una franja, de altura variable, que se instala en la parte inferior de las paredes de una o de varias estancias. Se puede encontrar tanto en baños y aseos como en dormitorios y salas de estar. Esta franja es de un material distinto al que se utiliza para la decoración del resto de la pared. Además, también puede tener un color diferente, que contraste.
Los frisos pueden estar realizados en diversos materiales, y se pueden utilizar tanto para decorar como para ocultar algunos defectos en la pared. Por ejemplo, humedades ya reparadas y que no han quedado del todo bien. Pero eso sí, para colocar el friso hay que asegurarse de que la pared está en buen estado, y de que todos los defectos que podía presentar ya están subsanados.
En cuanto a su altura, suele estar entre un metro y un metro y medio. Además, no tienen por qué ser lisos, y pueden tener relieve. De esta manera se acentúa su carácter decorativo. Eso sí, antes de instalarlo es aconsejable elegir un modelo que no desentone con la decoración. También hay que tener cuidado de los materiales con los que se fabrica. Entre otras cosas hay que vigilar que, por ejemplo, el friso para paredes que se coloca en los baños esté preparado para resistir bien la humedad.
Materiales de los que están hechos los frisos
Principalmente, el friso para paredes está fabricado a partir de cuatro materiales: madera, pvc, dm y melamina. La instalación de cualquiera de ellos aporta un toque de distinción y calidez a las estancias en las que se coloca. Además, contribuye a mejorar su aislamiento.
El friso para paredes realizado en madera puede dar, en función de su acabado, un aspecto rústico o elegante a una vivienda. Eso sí, los frisos realizados en madera son quizá los que más mantenimiento posterior a su instalación requieren. Será necesario barnizarlos o pintarlos cada cierto tiempo, y limpiarlos con regularidad en caso de que tengan relieve para que no acumulen polvo.
En cuanto al friso para pared fabricado en PVC, está especialmente recomendado para estancias con humedad, como los baños. También puede colocarse sin problemas en una cocina. Además, como soporta mejor que otros tipos de friso los golpes y las rozaduras, también es adecuado para proteger las paredes de los cuartos de los más pequeños. Además, su precio es generalmente más ajustado que el de los frisos de madera, y no necesita mantenimiento.
Los frisos de DM son los más indicados en el caso de que el presupuesto para su colocación no sea elevado, pero se quiera dar un aire renovado a una o varias estancias. Es el más económico de todos los tipos de friso. Además, está disponible con todo tipo de acabados, es bastante resistente y su mantenimiento es sencillo y da poco trabajo, lo mismo que su instalación.
Por último, el friso para paredes de melamina puede estar disponible en diferentes colores. También en imitación a la madera en distintos tonos. Mantenerlos una vez instalados es bastante sencillo, y no hace falta mucho trabajo para tenerlos en perfecto estado.
Como puedes ver, se pueden instalar frisos para pared de diversos materiales y con distintos acabados. Solo hay que elegir el que más convenga para cada estancia según el presupuesto de que dispongas, y elegir a los profesionales más indicados para su instalación, como los de Decorman.